jueves, 22 de septiembre de 2011

Hombre errante

La vida se nos va en un motel de paso
En una canción de amor
Una guitarra y un acordeón.

Prende el cielo en llamas
Y nosotros

Con la mente en blanco pecamos de pena.


Y un susurro
Y una voz que nunca volveremos a escuchar
Un grito mudo se escapa entre el tumulto
Un día es una noche y una noche son mil vidas.

Languideciendo sobrevivimos
Como muertos andantes
Como sombra en el suelo
Somos los hombres errantes.